TODO CAMBIO
Todo cambio de la noche a la mañana, sus besos fueron
suprimidos, sus palabras de amor ahora solo insultos, mis noches de amor solo insomnes
y miedos a mi lado.
Dejaron sus palabras de alagarme para convertirse en
ofensas, en insultos que no solo me concernían a mí, también a mi familia que
nada sabía de sus cambios de humor continuos, siendo simpático solo cuando a él
le parecía.
El día fue infierno, y la noche terrorífica, siendo la noche
peor, ya que sus gritos podían oírlos mis hijos, y eso no me permitía mas que
callar para que no se enfureciese jamás, los golpes son las silenciosos que las
palabras, pero duelen más, hasta que te haces insensible, para el… déspota.
Dejas a un lado miedos y morados, te cubres mas, te
arreglas menos, nada es de su agrado, pero no es culpa tuya, solo él es el
dueño de sus insatisfacciones, y tu su rehén por no poder desterrarlas.
Ojalá mucha gente leyese tus denuncias y pudiéramos cambiar algo.
ResponderEliminarBesos Lola
Bueno no importa Rafa, hay gente que lee pero no comenta, hay veces que es difícil hacerlo, mucha gente no se sabe que decirle, pero yo veo las personas que hoy han pasado a leerme. Gracias Rafa. Un abrazo.
EliminarSon muchas las que se sentirían identificadas con esta forma de no vida.
ResponderEliminarMuy triste, amiga.
Besos
Un beso Vero, pronto todo cambiara.
EliminarMas sigue y suma, amiga Lola, lo triste es que no para y por desgracia no le veo soluciones a corto plazo.
ResponderEliminarUn abrazo y feliz miércoles.
Hola Marina, así esta ahora la cosa, todo cambiara con el tiempo. Un beso.
EliminarCreo que se está haciendo poco por defender a la mujer; hasta ahora ningún político propuso medidas mas duras contra los maltratos; pero de robar no se olvidan
ResponderEliminarBesos amiga.
No están haciendo nada, pero pronto cambiara todo. La ley tiene que ser ejercida, las mujeres lo necesitamos y no lo merecemos. Un abrazo.
EliminarLa verdad al desnudo Lola, es una masacre, un genocidio premeditado por el maltratador, que no sé como se puede detener. Mi amiga Ángélica murió a manos de su pareja, él era policia, y hoy ya está en libertad y mi amiga enterrada...
ResponderEliminarMe sublevo desde el alma ante esta masacre, y debemos levantar siempre la voz, por aquellas mujeres que silenciaron la suya con la muerte.
Un abrazo con alas de esperanzas.
Ángeles.
Así es Ángeles, pero yo tengo fe de que pronto todo cambie, tenemos una ley injusta para las mujeres, también los hombres maltratados lo pasan mal, si lo sabré yo...
EliminarUn beso grande.