CARTA DE UNA MUJER SIN ESPERANZA
Nadie me conto que la
vida era fácil, tampoco me contaron que para vivirla debería dejar que me
abofetearan cada día.
Nadie me conto que querer
a una persona fuese tan difícil, cuando la otra persona no se deja querer, y a
cambio te deja sin sustento para tus hijos, sin una palabra de mimo, sin un
sueño para vivirlo.
Nadie me dijo que la vida
no era para pasearla, ni para agradecer cada día la luz del sol, si cada noche
llega a casa la pesadilla y la incertidumbre.
Nadie me dijo que por obligación
tendria que vivir la vida al lado de mi verdugo, por eso, y para que no me pegue
cada día, le pido que me mate esta noche, no será para mi difícil aceptarlo,
pero si vivir cada día al lado del miedo que me paraliza y me hace desear lo
que llegara hoy… la muerte.
Carta de una mujer
maltratada que ya no quiere vivir, porque no tiene una vida para vivirla.