viernes, 13 de marzo de 2015

ACOSO




ACOSO


Todo empieza antes de…


Cuando aun no hay sentencia de separación, porque cuando eso llega ya has pasado por las peores pesadillas de tu vida ¿o no?


Una vez libre  de ese trauma siguen, la persona que antes te quería “muchísimo” no puede soportar tu alejamiento, piensa cuando estabas a su merced, cuando su día a día empezaba con tus lagrimas, con sus golpes, con sus insultos, y eso le hacia sonreír ante tu mirada de miedo.


Cuando eso ha terminado (supuestamente) empieza el acoso, y ves como se pasea cerca de ti, va a buscarte a tu trabajo, se deja caer cerca de tus amigas, a veces también habla con ellas, y le cuenta lo mucho que te quiso y lo puta que eres.


Más de una vez al llegar a casa ves cosas que tu no has dejado por medio, ves que el azucarero esta fuera del armario, no sabes si habrá puesto algo dentro, no sabes si el gas se ha quedado abierto, cuando hueles algo raro, no sabes en qué momento tu casa puede salir por los aires, es una  tensión continua.


Después sabes que el azúcar tiene una pequeña cantidad de matarratas, algo que no te mata de pronto, pero te hace estar muy enferma, tu vida de antaño se convierte en algo no tan malo, y hasta piensas que el maltrato fue llevadero, el estado de ansiedad de ahora ya no lo es.


Si te asomas a la ventana le ves frente a casa, si llaman a la puerta el corazón se sale del pecho, si llamas a la policía… dicen que no ha hecho nada, y esperan a que pase algo para detenerle, quizás cuando pase ya no tenga arreglo.


Y no duermes, ni comes, te resbalas en la ducha porque alguien puso un suavizante que te hace caer, pero eso son accidentes posibles en todas las casas, pero en la mía no, vivir sola es saber cómo dejas las cosas cada día, y todo tiene su orden, nada pasa desapercibido.


No hay vida que pueda resistir el acoso, la familia te ampara durante un tiempo, las amigas se quedan cerca de ti, o incluso te ofrecen su casa por un tiempo, después volverás a tu casa pensando que el acosador se canso y se marcho, pero no hay que engañarse, es un lobo a la espera de de que la víctima se confié, después seguirá el acoso, es un juego divertido, cuando se canse… te matara.


8 comentarios:

  1. Los lobos son preciosos... en el monte.

    Abrazotes.

    ResponderEliminar
  2. Efectivamente. Gracias por comentar mi entrada. Un abrazo.

    ResponderEliminar
  3. Y yo sin ánimo para nada sin haber sufrido comp estas mujeres el acoso de un mal hombre sin merecerlo, te aseguro que no apreciamos lo que tenemos, al menos yo, me ha impactado mucho tu entrada.
    Gracias por tu visita y tus palabras de ánimo, eso me da vida, como me dices no me dejaré vencer, lucho para ello con todas mis fuerzas y, como dices, seguiré escribiendo porque eso me alivia el alma.
    Besos, feliz fin de semana.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Amiga mía, entiendo que estés deprimida, tenemos épocas regulares y esas a veces duran más de la cuenta, pero es el momento de salir, de mirar las flores, y empezar a calentarse con el cálido sol de primavera. Las cosas pasan al menos que haya por medio muertes de seres queridos, eso tarda un poco más, pero si eso ha pasado, hay que pensar en las buenas épocas vividas junto a esa persona, porque todo al final merece la pena. Animo mi querida amiga. El tiempo pasa, y quedan muy buenas cosas por vivir. Un abrazo.

      Eliminar
  4. Respuestas
    1. Hola Lapislázuli, sí que son tremendas pero al final de tanto oírlas nos estamos acostumbrando, y eso si que es penoso, Espero que todo cambie pronto por el bien de estas mujeres que tanto sufren. Un abrazo.

      Eliminar
  5. Pero dentro del tremendo drama que supone, sigue sucediendo, porque las leyes al respecto creo que hacen aguas por todos lados.

    Besos Lola.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Claro que las leyes hacen aguas, a ellos, los maltratadores les ampara una ley que a las víctimas no tienen, y eso le importa solo a las personas de bien… como tú. Un abrazo.

      Eliminar